Argumento

En un aeropuerto de EEUU suspenden los vuelos locales por tormenta. Dos desconocidos, una mujer blanca que se va a casar y un cirujano negro que tiene que ir a operar, no pueden desplazarse a sus destinos. No quedan coches de alquiler y ella propone ir en avioneta. El piloto tiene un infarto en pleno vuelo y se estrellan en mitad de las montañas. Ambos consiguen sobrevivir solos.
Traducción breve

Una blanquita se va a casar pero tiene una aventura cañera con un moreno bien macho y con estudios. Fiesta blanca incluida. Resultado: deja plantado al marido.
Traducción simbólica

El anciano piloto blanco que muere es el hombre occidental, la avioneta es la tecnología. No han llevado hasta un punto en el Historia. Para seguir avanzando sólo tenemos lo humano. Pero el hombre blanco ya no es capaz de llegar más allá, donde había prometido.

Ella es periodista y viene de hacer un reportaje de neonazis. Significa que volver a la tradición es una opción que queda atrás.

La primera vez que se encuentran, el perro del piloto gruñe ante el señor negro. Lo percibe como competencia para su amo. Luego sin embargo se convierte en un fiel aliado de los dos supervivientes. El perro es el mejor amigo del hombre y sigue a su lado supeditado a las aventuras y transformaciones que éste, como cumbre de la naturaleza, decida embarcarse.

«Nadie sabe dónde estamos, sólo nos tenemos el uno al otro». No sabemos hacia dónde iremos como especie.

La mujer es la que lo convence para ir en avioneta, y así se recuerda más de una vez. También es la que quiere desplazarse en vez de quedarse en el fuselaje. Eva es quien saca a Adán del paraíso y lo conmina a avanzar.

«Dios hizo algo genial. El cuerpo sabe lo que tiene que hacer». En esto no están por casualidad, su naturaleza los ha llevado hasta donde están.

En otra escena, él apela a usar la lógica. Ella habla de su instinto y su corazón. «El corazón sólo es un músculo», dice en algún momento él, que es neurocirujano. Luego ella se lo echará en cara. Ese músculo es al final el que rompe los planes de las personas y mueve los esquemas y las civilizaciones.

Le pide que ponga en el móvil lo que estaba escuchando en el aeropuerto. Suena música clásica occidental. Solos como están ante el futuro incierto, son herederos de occidente.

Llegan a una cabaña donde hay un piano. ¿No quieres volver a casa? Volveremos a casa. Prueban a hacerse unas raquetas para andar pero se deshacen. Ambos saben que esa casa ya no existe. Mientras tanto, ella pone la grabadora de él y se oye un mensaje en el que su mujer lo abandona.

Durante toda la película ambos protagonistas tiene una extraña vitalidad impropia de quien lleva días sin comer, como cuando hacen el amor en la cabaña. También hacen reflexiones igualmente impropias de su situación, o cortan el hilo en mitad de una conversación para hacer referencias aparentemente inconexas sobre sus vidas pasadas u otros pensamientos. Cuando leemos la película en su sentido figurado es cuando todo encaja de manera natural. Es el caso de la conversación cuando están en la cabaña y ella dice que tiene que haber alguna carretera cerca. El responde que su mujer no lo dejó, sino que tuvo un tumor y se convirtió en su paciente pero no pudo salvarla.

Cuando descubre un lugar habitado, él adivina que ella está preocupada por que pueda saberse de su relación amorosa. Pero ella está abrazada a él. Es con él con quien quiere estar. Como él no tiene pareja, cuando al final de la película acaban juntos, ella es quien comete la traición. Como Eva.

Llegan a la civilización y quien ve a la protagonista tambaleándose hacia él es otro señor blanco mayor. De nuevo el blanco no es una opción para el futuro.

Vuelven a su vida habitual en la civilización. Al principio él no tenía barba, pero luego conserva la que le creció en los días de aventura. Ella conserva el rasguño en la frente. Están marcados por su experiencia juntos en la naturaleza cruda, fuera de su vida artificial, y ya no pueden prescindir de ella.